Samir Flores Soberanes, quien lucha por la vida nunca muere
El sol del mediodía arde implacable en el pequeño patio de Santa María Mixtequilla (SMM), estado de Oaxaca, donde se encuentran reunidas unas 50 personas. Algunas mujeres intentan refrescarse con abanicos de papel, mientras los hombres llevan grandes sombreros para aliviar el calor del Istmo. Un anciano, de pie, habla con decisión mientras la multitud apoya sus palabras con imperceptibles movimientos de cabeza: “quieren pagarnos por un metro de tierra lo que vale un kilo de tortillas”.
En México, al igual que en el resto de la región y en gran parte del planeta, la lucha por los derechos de los pueblos indígenas, la tierra, el territorio y un medioambiente sano se ha convertido en una de las reivindicaciones más extendidas y, por desgracia, con mayores riesgos para las personas, organizaciones y comunidades que las llevan a cabo. Esto se debe a una multitud de factores, desde los intereses políticos y económicos que afectan hasta la falta de perspectivas comunitarias e interseccionales a la hora de garantizar su protección, seguridad y legítima labor que desempeñan.
“Frente a la desmemoria, que contribuye a la opresión y marginación, se reivindica el arma de la memoria. La memoria es fundamental en la vida de los pueblos, ya que evita que caigamos en el olvido de nosotros. A través de la memoria se le da sentido y, por lo tanto, estabilidad a la existencia humana. En la memoria la tierra es mucho más que un espacio productivo, ya que está llena de símbolos y referencias entrañables, por eso los viejos de Temoac exclaman con vehemencia ‘esta tierra costó sangre’ en referencia a la gesta zapatista ‘y por eso no se vende’.
El pasado enero del presente año, Brigadas Internacionales de Paz, acompañó al Frente de Pueblos en Defensa de la Tierra y el Agua, Morelos Puebla y Tlaxcala (FPDTA-MPT), en el encuentro nacional de radios comunitarias en la defensa del Territorio y la Vida, llevado a cabo en el Valle de Tehuacán, Puebla. Allí, tuvimos la oportunidad de conocer divergentes medios alternativos de comunicación “Voces de la Resistencia” que utilizan su voz para promover la cultura, las tradiciones, la unión de las comunidades indígenas y el derecho a la libertad de expresión.
El día 10 de marzo de 2021, PBI-Canadá y Amnistía Internacional organizaron un encuentro virtual para Isela González de Alianza Sierra Madre A.C.
(El siguiente texto es un extracto de un Briefing Conjunto elaborado entre PBI-México y el Centro de Derechos Humanos de la Montaña “Tlachinollan”, circulado con el cuerpo diplomático)
El año 2000, en el Estado de Guerrero donde todavía no se hacia presencia internacional, PBI empieza sus primeros acompañamientos a organizaciones locales de defensa de los derechos humanos. Ya habían pasado cinco años desde las primeras peticiones de acompañamiento por parte del Servicio Internacional para La Paz (SIPAZ) en Chiapas después el levantamiento Zapatista en 1994. En diciembre de 2003, PBI empezó a acompañar a los integrantes del Centro de Derechos Humanos de la Montaña “Tlachinollan” en su nueva oficina de Ayutla de los Libres.
Desde hace más de una década, en la Sierra Norte de Puebla, comunidades totonacas luchan por la supervivencia de sus tradiciones y la defensa de su territorio. En enero de este año, ganaron una batalla judicial importante en contra de la construcción de un proyecto de represa, cuando el Ayuntamiento local revocó los permisos de construcción de la obra Puebla 1 por graves ilegalidades en los procesos administrativos.
Entrevista con Yésica Sánchez Maya, abogada feminista y directora adjunta de Consorcio Oaxaca. Parte 2
Consorcio Para el Diálogo Parlamentario y la Equidad Oaxaca, promueve el respeto y el ejercicio de los derechos humanos de las mujeres y la equidad de género.